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miércoles, 9 de mayo de 2012

7 de mayo. Tabriz-Miyaneh. "La bestia parda"


La he vuelto a liar. No quería hacer tiradas de más de 100km y hoy va y me chupo 163km. Soy una bestia parda...Pero todo tiene una explicación...

Mi intención era acabar en Bostanabad a 65km de Tabriz, pero he llegado allí que eran la 13:30h y he pensado que hago aquí toda la tarde y he proseguido un poco más. Suerte que lo he hecho desde Bostanabad la carretera empieza a perder altitud muy suave y a transcurrir entre montañas de pasto verde y ríos. A pesar de que el viento era en contra, y no me permitía, pasar de 25km/h en esta larga bajada de 80km. Han sido 7h. Pero las últimas cuatro he disfrutado como un camello de la ruta de la seda.

Y digo las cuatro últimas porque las tres primeras han sido de mirar al cielo y preguntar "que he hecho yo para merecer esto". Me ha llovido, no he parado de subir repechos, los camiones me han ahumado de arriba a abajo, el viento me ha desquiciado...

A media tarde me ha entrado un extraño dolor de estómago y he pensado que ya había pillado una gastroenteritis. Pero resulta que ha sido un empacho de "calamares en su tinta" que es como yo llamo a los camiones viejos, que al pasar por mi lado me escupen un chorro de tinta negra en estado gaseoso. Creo que algunos lo hacen a propósito. Pero he ingerido tal cantidad de humo que la boca me sabía a seat 127 y los cuescos sonaban como el claxon de un Citroën.



He llegado a Miyaneh y a la entrada de la ciudad, desde una tienda de comestibles me hacen señas para que vaya. Voy y hablo en ingles con el propietario de la tienda y me invita a un té. Le digo que tengo que encontrar un hotel y que estoy muy cansado. El me dice, palabras textuales, "para mí sería un honor que pudieras compartir 10 minutos con nosotros". Me bajo de la bicicleta sin pensármelo. Hablamos de todo, nos hacemos una foto y me insiste en que no me olvide de él, que le gustaría saber que tiene un amigo de España...gran tipo.

El hotel es un tres cucarachas, pero para ducharse y descansar ya vale.

Salgo a cenar y acabo en un gran salón comedor. Les digo que quiero cenar algo, lo que sea. Me sugieren Kebap (como no, suerte que me gusta, porque sólo cocinan esto, todavía no he visto cocina elaborada). Al final me traen una fuente de sopa y dos tiras de kebap con arroz. Soy la atracción del salón, cocinero, camarero y gerentes me dan conversación mientras como. El gerente es también profesor de inglés para niños (pero no tiene muy buen nivel de inglés). Me siento como en el bar de toda la vida, donde te sientes en familia. Al ir a pagar, el gerente dice que soy su invitado y no me deja pagar...Eso no pasa en mi ciudad ni de coña, anda que me van a invitar a cenar en el Motel Empardan y decirme, "tú eres mi invitado". Nos hacemos unas fotos y percibo mucha admiración por mi y por mi viaje.
                         
En el mundo hay gente muy maja y gente muy cabrona, los momentos, los días e incluso una vida entera la hace interesante y válida la diferencia entre el número de gente maja o gente cabrona con la que te cruces. Si te encuentras más de lo segundo habrá infelicidad, si más de lo primero habrá felicidad. Hoy me he encontrado más gente maja que cabrona...por lo tanto hoy estoy feliz.



Lo peor: La intoxicación de humo que he pillado.

Lo mejor: La gente maja de Irán...al final va a ser verdad que Irán la gente es muy maja.



Etapa dedicada a David Caballero, quien daría sus dos piernas por estar aquí conmigo.....espera, si das las piernas, ¿con que pedaleas? ¡Yo no cargo contigo gordito!




Distancia: 163km Tiempo: 7h 07min. Vel. media: 22,5 Vel. max: 63,5




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